jueves, 24 de mayo de 2012

Egoísmo justo

Cambios. ¿Cuántos cambios tienen que suceder en una vida para evitar el aburrimiento, la rutina, el hastío? Y es que personas como yo no podemos permanecer de un mismo modo por mucho tiempo. Hay que cambiar, entrar en un ciclo de constante renovación. Cuando algo aburre, BYE. No hay razones para permanecer ahí que sean lo suficientemente válidas o que mitiguen esas ansias de transformación.

Y hay muchos tipos de cambios. Desde color de cabello, aretes nuevos, el tatuaje que siempre quisiste, estilo, clóset, amistades, tendencias literarias, bebida favorita, postura política, relaciones, música desconocida, etc. Y cada cambio atiende a una necesidad particular de nuestra mente y nuestras emociones. Si TODA la vida has querido comprarte unos pantalones rojos, o azul pastel y nunca te animaste porque te repites que 'no es tu estilo'; el día que como yo digo, la vida te ataca, lo primero que vas a hacer cuando estés en el centro comercial es comprar esos pantalones y estrenarlos con toda la actitud de rockstar que no sabes ni de dónde salió. 

El problema reside en que muchas veces nuestras acciones no nos conciernen únicamente a nosotros, hay otros implicados que sin deberla ni temerla (aunque a veces sí), resultan si no afectados, sí involucrados en las consecuencias de nuestras acciones. Se vale ser egoísta y actuar por nuestros propios intereses; pero tampoco podemos desentendernos de quienes nos rodean. Si bien no se trata de hacer lo que los demás esperen de nosotros, sí hay que tomarnos el tiempo de pensar, aunque sea poquito en ellos. Y es difícil. Es difícil hacer lo que uno quiere y sabe que es lo mejor para sí mismo sin que te importe lo que pasa con los demás, hay que ser considerados pero no olvidar que la prioridad a final de cuentas es el bienestar personal. No podemos ir por la vida lastimando a quienes están cerca sólo porque nosotros no sabemos lo que queremos, por indecisión o falta de valor para actuar. 

Seamos egoístas, sí. Porque al final del día, nadie te va a cuidar mejor que tú mismo. Pero un egoísmo consciente, honesto. No podemos dejar de lado nuestros sueños y metas por perseguir las de alguien más, pero debemos hacérselos saber, es lo justo.